CONCLUSIONES
1) La lengua cacana constituye una incógnita. Ante la carencia de hablantes, gramáticas, diccionarios, glosarios o documentos, resulta imposible su reconstitución gramatical y léxica, y aventurada la determinación precisa del área geográfica en que habría sido hablada.
2) Probablemente la lengua autóctona de los indios de Coquimbo y Copiapó posea un origen común con la lengua de los diaguitas argentinos, o bien sea una derivación de ella. En todo caso, a la llegada de los españoles ambas variantes ya habrían sido mutuamente ininteligibles.
3) Tanto el nombre "diaguita" como su lengua el "cacán" son nombres genéricos, aplicados a un gran número de pueblos y de lenguas.
4) El levantamiento toponomástico amerindio de las regiones III y IV (Atacama y Coquimbo) refleja un predominio de voces de origen quechua hacia el norte, y mapuche, hacia el sur.
5) Entre un 20 y un 25% de voces indígenas no han podido ser clasificadas con un criterio etimológico, por carecer de parámetros que posibiliten su inclusión (gramáticas, diccionarios, glosarios). En el porcentaje enunciado tendríamos que encontrar voces pertenecientes a la(s) lengua(s) autóctona(s) de Coquimbo y Copiapó.